viernes, enero 8

Aquí somos todos raros.


Chiquillo mira,

si estás leyendo aquí, entonces no eres normal.


¿Quién se dedicaría (aunque fuese un minuto) a leer los poemas de una loca destartalada?


No, no... hay que estar un poco tocado para hacerlo

Que raro ah.


A puesto que usted intenta crear versos en la noche,

apuesto que no le gusta la misma música que a los demás,

y que al estar enamorado, no dedica una canción de Arjona,

dedica un cuento, dedica un poema.


Déjeme decirle, que es usted un ridículo.

Si, como lee.


Usted es RARO.


Si lo miran en la calle, no es por que sea el más guapo.


Usted es RARO.


Raro como una profesora que gana un premio nobel.

Raro como un cabro chico de doce que escribe poemas.

Raro como un profe de física que en vez de ser poeta, es anti-poeta.


Mire que raro ah.


Raro como la bruta que escribe esto.

Que le gusta su letra en cuadernos de hojas blancas.

Que solo ocupa "Bic punta fina"

Que cree que este poema no es poema, es un chiste.

Que se pone a jugar con silicona y después se enoja por que está pegajosa.

Que no tiene intenciones de seguir escribiendo y lo hace.

Que LAME el chocolate.

Que come leche seca, chocolate en polvo.


¿Sabe que? Vayase a su blog, a su cuaderno, o a lo que sea.

No lea más.


Oye... ¿Sabes? ERES RARO.




(Y obviamente, yo también)

2 trenzitas:

Juana Matte dijo...

ay washita, seré rara?

Vicente dijo...

aaaaah me encanta, no puedo dejar de leerlo