sábado, agosto 31

Felicidad

Acá no se permite sufrir
¿ves esos letreros?
No se puede,
y el que lo intente está atentando en contra de su vida,
vida magnífica y maravillosa llena de amor y luz,
obligatoriamente hay que ser feliz
¿no te pone eso contenta?
No importa lo que pase
ni lo que digan
tampoco con cuanta gente compartes tus tardes de sol
puedes estar solo y aún así ser feliz
es un pacto con el colita e flecha
la felicidad es la raíz cuadrada en el ser humano
está implícita
lo demás es externo,
lo demás es el mundo haciendo de las suyas
no hay que permitirlo
tu sabes, por aquí han pasado varios llorones
haciendo canciones,
escribiendo poemas,
¡Por favor! pierden su tiempo
no hay que ser sensible para ser feliz
solo hay que serlo,
y quién ose intentar cambiar las reglas será desterrado
a algún lugar donde se reúnen todos los quejumbrosos
que nos oscurecen la vida a nosotros, los alegres.

Así que empaca todas tus cosas,
tu mochilita azul y tus estuchitos y lapices ridículos,
que te tienes que ir, porque ya se nos agotó la paciencia
no vamos a estar esperándote toda la vida
ya no lo lograste, saliste con fallas de fábrica
no es posible lidiar más con esa pena que tienes
nos aburrimos todos de ti y de tus llantos
¡Así que te fuiste no más, aquí nadie te va a extrañar!


jueves, agosto 29

Fotografía

A eso de las cinco y media todo se empieza a ver amarillo
o dorado, no sé, 
el crepúsculo es impuntual
y la gente empieza a multiplicarse en las calles
y caminan no tan rápido y muy curiosos
los colectivos decoran con las luces de sus letreros
hasta que en la noche solo se ven ellos y los faros,
y la gente disminuye hasta que ya no hay nada
hay silencio y unos pocos autos lo interrumpen,
y algunos duermen
otros salen a bailar, a celebrar
cualquier motivo que exista para ser felices
incluso si no lo son, es fácil pretenderlo a oscuras,
las noches siempre terminan con amargura
pero la mañana es alegre y segura,
con luz, té y pan con mantequilla,
con olor a almuerzo y la radio encendida
escuchando tangos al mediodía.



sábado, agosto 24

Despido

Me lo imaginaba de cualquiera menos de ti
con esa chaquetita apagada y esos pantalones rotos,
no te preocupes aquí tampoco es como si te fuéramos a extrañar,
no a ti al menos, 
tal vez si a tu aroma cuando traías café.
Estás despedido, y sí te despido es justamente por que quiero hacerlo antes de que renuncies,
prefiero pagar la indemnización a seguir esperando a que te decidas,
pero cuando ya no tengas como pagar tus deudas
y los abrazos no sean suficiente pago para el embargo
no vuelvas, 
esta compañía ya ha re-contratado a unos cuantos y como siempre
han fallado.