jueves, febrero 27

Un año

Cuantas cosas pasan en un año
cuantos pasos dí, cuantos perdiste
a cuantos más debiste conocer
¿era tu hora? ¿nuestra hora?
nunca estuve lista para decirte adiós,
tenía tan agrietados los ojos que ni siquiera pude verte dejar de respirar
mi vida de pronto cambió y te fuiste y crecí,
y no quería crecer
no te quería perder,
te quería aquí durmiendo a mis pies
o ver tu silueta caminando por el patio
escucharte llamar en las mañanas,
saludarte al volver de mis viajes,
preguntarme adonde tu mente alguna vez habrá ido.

Nadie nunca logró entender mi llanto cuando te fuiste
algunos pensaron que estaba exagerando,
no me importó porque sé que no todos  tuvieron la suerte
de tenerte en su vida o de conocerte,
de conocer nuestra historia y nuestra crianza juntas
de saber que no siempre los hermanos son humanos, sino que también criaturas.

Ahora que ya te fuiste hace un buen tiempo,
me pregunto donde estás y si es que me estarás viendo,
¿te acordarás que estuvimos juntas? ¿estás sonriendo?
no sé si volveremos a vernos quizás no existe ni el cielo ni el infierno,
por el momento solo me puedo acordar de ti
aún me haces llorar, pero ya no estás aquí para consolarme y hacerme reír
te extraño sobretodo porque sin ti no sabía existir
y ahora que he tenido que aprender me ha dolido tanto no poder compartir
mis historias nuevas que a veces solías oír,
tus ojitos verdes enseñándome a escuchar,
tus silencios eternos que me calmaban de llorar
la vida sin ti es tan rara y a la vez tan igual,
y espero que todo algún día va a vuelva a empezar.