domingo, julio 14

Vecino

Sentado en un banco de la plaza más cercana
estabas escuchando música
o tal vez un partido transmitido desde una radio nacional
estabas ahí, marcando todo con tu presencia 
irradiando algo
abandonando tus energías ahí
para mi, 
que te miré hasta que contaste tus monedas y compraste un super ocho,
y te fuiste, todos los días ahí y después no estás
y yo te miro, te miro
como si un día de estos fueses a hablarme,
a regalarme tu super ocho,
a contarme el resultado del partido,
a mostrarme una canción nueva,
a notar mi vaga presencia en tu presente
en el que estoy ausente,
y solo bastaría un gesto para abandonar todo
un saludo y me deshago en súplicas
para que me dejes tocar tu pelo en las mañanas
o al menos darte una taza de té,
es que tu no sabes cuanto tiempo llevo parada aquí,
soy lo suficientemente valiente para admitir
que soy muy cobarde para dedicarte una sonrisa,
pero algún día va a nacer
esa valentía va a nacer
y al menos serás mi amigo,
o una suerte de hombre a mi lado,
a mi lado, a este lado,
al lado izquierdo inimaginable
en la casa en la puerta de al lado
con la mascota de al lado y la mujer de al lado
tu a ese lado y yo a este sin azúcar ni café,
esperando que me ofrezcas al menos endulzarme la tarde
y luego las mañanas y las noches,
hasta que desaparezca.

0 trenzitas: